Con mi obra trato de hablar sobre mi generación y el lugar en el que ésta se encuentra, no solamente en el arte, sino también en la sociedad. Utilizo el color  y  texturas para hablar de sentimientos complejos y sensaciones universales que de otro modo me resultaría difícil expresar, como la fragilidad del cuerpo, la enfermedad, lo efímero o lo sublime.

Aunque normalmente parto de un referente real a la hora de realizar mis trabajos, siempre trato de establecer una desvinculación con su forma original para que el espectador que vea mi obra disfrute de su propia experiencia estética en vez de la mía.

La naturaleza y las formas orgánicas son muy importantes para mí, ya que creo son capaces de remitirnos a un pensamiento primitivo. También es importante el paso del tiempo en mi trabajo dada su capacidad de plasmar el cambio, por eso trato de utilizarlo como una herramienta de representación más.